Los factores culturales constituyen un reto a superar en el momento de exportar. Aunque las personas son demasiado complejas para ser entendidas, podemos realizar un cuadro general de características de la cultura a la que se pretende vender con éxito un producto. Por ejemplo, mientras que en los Estados Unidos y el Norte de Europa el tiempo es dinero, en Medio Oriente todas las cosas de la vida deben tratarse en los términos de su propio tiempo, las negociaciones son duraderas y tienen como principal objetivo hacer que las partes se conozcan. Algo parecido sucede con la palabra de las personas, mientras que para los primeros la palabra no basta y debe constar por escrito, para los segundos la palabra es un contrato que será respetado. La habilidad para comunicarnos en nuestro propio idioma no es tarea fácil. Pero cuando cambia el idioma y la cultura, se presentarán retos adicionales para la comunicación. Alcanza con poner atención a la gran atracción que genera el ...